Esta decisión se tomó en marzo, cuando la última hembra fuera atacada junto con su cría por cazadores al este de Kenia.
La última jirafa blanca que queda en el mundo será monitoreada con un rastreador GPS para protegerla de los cazadores.
La jirafa puede pasear con más seguridad en los campos de Kenia gracias al dispositivo que tienen en uno de sus cuernos; los guardabosques pueden monitorear todos los movimientos del macho solitario.
En marzo la última jirafa blanca hembra fue asesinada junto a su cría, al este de Kenia, así que se decidió optar por un GPS para cuidar al macho.
El último mamífero de esta especie es hijo de la hembra abatida, mencionó la reserva Ishaqbini Hirola en un comunicado.
R:Grecia Arbieto
Fuente: TvAzteca
