La industria vinícola se vio perjudicada por los cierres de cafés, restaurantes y hoteles.
Este último martes 20 de abril la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) dio a conocer que el consumo mundial del licor solo cayó 3% en 2020.
El consumo del año pasado, de acuerdo al organismo, se calcula en 234 millones de hectolitros pese a la pandemia, 7 millones menos del que se presentó durante la crisis financiera de 2008-2009. Se trata de la cifra más baja desde 2002.
Pau Roca, director general de la OIV, señaló que “el aumento de las ventas de vino en los supermercados compensó bastante bien los cierres”.
Europa, que posee el 48% del mercado, constata una estabilidad en el consumo de vino en 2020, aunque la cifra global oculta fuertes variaciones entre países. Francia y Alemania mantuvieron estable el consumo, pero se disparó en Italia un 7,5% respecto a 2019, su nivel más alto de la década, y cayó un 6,8% en España.
Redacción: Elizabeth Meneses
Fuente: La República.